Las personas que reciben una visa de inmigrante cuentan con la autorización del gobierno para quedarse en los Estados Unidos por el tiempo que deseen.
Por ejemplo: Reunificación familiar, trabajo permanente, como inversionista, por el programa de diversidad (lotería de visas).
Las personas que reciben una visa de no inmigrante tienen la autorización de los Estados Unidos para visitar el país temporalmente.
Por ejemplo: Turismo, para buscar atención médica, negocios, o estudiar.